Hace casi un año, Murtaza Ahmadi se hizo conocido en todo el mundo aunque nadie sabía quien era. Las fotos de este pequeño niño con una camiseta de argentina hecha con una bolsa de nylon recorrieron el planeta.
La palabra "Messi" y el número 10 en la espalda también formaban parte de su indumentaria casera. Con el correr de los días, se conoció la historia completa de este nene afgano fanático de la Pulga.

Parte de su sueño se vio cumplido cuando el futbolista rosarino le envió, a través de Unicef, dos equipos completos: uno de la selección y otro del Barcelona, con firma incluida.
Sin embargo, Messi y el club catalán no se quedaron sólo en eso. Intercambiaron mails con la Federación Afgana de Fútbol (AFF) para organizar un encuentro con el pequeño.

Finalmente, ese día llegó. El Barcelona viajó a Doha (Qatar) para disputar un partido amistoso contra Al Ahli como parte de los acuerdos comerciales con su auspiciante, la línea aérea Qatar Airways.
Allí, ocurrió el encuentro esperado. Messi conoció, saludó y abrazó a Murtaza. Pero lo mejor vino tras entrar a la cancha: con una felicidad que lo desbordaba, el nene corrió por toda la cancha a su ídolo. ¡Hasta lo tuvo que sacar el árbitro! Mirá el video:
