El club El Fortín es uno de los cinco que conviven en Colón, una localidad de 25 mil habitantes ubicada al norte de la provincia de Buenos Aires.
Por estos días no tiene cancha y los chicos juegan en un baldío. Por eso, un hijo pródigo que cumplió el sueño de jugar en primera y vive en Córdoba decidió hacer algo para ayudarlos.
Se trata de Guillermo Farré, el capitán de Belgrano, quien demoró sus vacaciones para viajar a su ciudad natal junto a los integrantes cordobeses de Passion Foot, una fundación que nació en Francia y que tiene subsedes en distintos países como Marruecos, Senegal y Canadá.
Más de 100 chicos participaron de una jornada donde aprendieron y compartieron junto al ídolo celeste, los profesores y hasta una jugadora profesional de Francia. Numerosos padres no quisieron perderse tan linda actividad y acompañaron a sus hijos. Vale aclarar que las familias no tuvieron que poner ni un peso para la clínica deportiva.
Obviamente, Guille jugó con los niños y adolescentes, que se mostraron felices por vivir una jornada que no olvidarán jamás. Mirá el video:
Cuando era chico, Guillermo Farré empezó a jugar a la pelota en El Fortín. Posteriormente, se formó en las divisiones inferiores de Central Córdoba de Rosario, donde debutó en primera.
En el año 2007 llegó a Belgrano para no irse nunca más. Fue autor del gol que le dio el ascenso al club de Alberdi en la cancha de River y heredó la cinta de capitán al retirarse Gastón Turus. Además, formó su familia en Córdoba junto a su mujer y sus dos hijos.
"La relación con Farré nació el año pasado, cuando lo invitamos a participar de una actividad que la fundación organizó en el Estadio Kempes. Se enganchó con la modalidad de trabajo y el mensaje de fondo de Passion Foot, en donde se utiliza el fútbol como herramienta formativa", nos contó Diego Buteler, uno de los encargados de la fundación que viajó junto al volante pirata.