"Querido señor Messi:
Escribo esta carta, no creo que llegue muy lejos, y si llega, espero que sea lo suficiente para llegar a sus ojos. Soy estudiante del profesorado de Educación Física, una carrera hermosa donde tenés la oportunidad de trabajar con cualquier tipo de edad...Le cuento: mi preferida es la de los niños.
Tengo la oportunidad de enseñar fútbol a edades entre 4 y 6 años, soy mujer, y aunque me costó ser aceptada por ese mismo motivo, lo conseguí y puedo asegurarle que en mi ámbito de trabajo, mis compañeros me aceptaron y los padres de mis alumnos lo han hecho por igual.
Le comento: mis alumnos se van con una sonrisa después de cada entrenamiento, y quiero contarle señor Messi que usted es una motivación para cada uno de ellos! Juegan a ser usted, ¿sabe?
"Mis alumnos juegan a ser usted, Messi".
Y aunque a esa hermosa edad, por lo menos yo y creo que varios profes piensan igual, no se les exige más que solo divertirse jugando.
Pero ellos ponen entusiasmo en mejorar, en ser el mejor. Llegan y dicen: 'Seño, hoy soy Messi', 'Seño, tengo el 10 como Messi', 'Seño mi papá me compró los botines de Messi'.
Usted señor Lionel genera sonrisas, genera entusiasmo, genera muchísimo en cada uno de ellos...
Ahora yo le pido ¡disculpas! Por cada argentino que lo trata de pecho frío y de no sé cuántas barbaridades más. Nadie entiende lo que significa estar en sus botines, ni tampoco entienden lo que es ser el mejor del mundo y de los tiempos!
¡No haga caso de esos cuantos que lo critican sin saber de sus frustraciones ni de sus orgullos! Sea usted mismo siempre, que así es como llego a ser el mejor, con tanto ímpetu y con tanto valor.
Messi, espero que esta carta llegue a usted y pueda saber perdonar. Es injusto que por unos cuantos abandone Argentina. Una Argentina que tiene millones de personas y sé que la mayoría lo admira y lo respeta.
"Es injusto que por unos cuantos abandone Argentina".
Y sobre todo, querido Lionel, si esta carta llega a usted, le pido que piense en cada pequeño que ama verlo jugar con la camiseta celeste y blanca. ¡Y no piense en esos que no entienden que un equipo consta de 11 jugadores y no sólo de usted!
Siga siendo la persona que es. Lo saluda una simple estudiante y una fanática del fútbol. Es un placer verlo hacer magia con la pelota. ¡Gracias por tanto y perdón por tan poco!".