Falta menos de un mes para que arranque el Mundial (el 14 de junio es el partido inaugural) y Lionel Messi no quiere dejar ningún detalle librado al azar: por eso realizó un viaje relámpago a Italia para ver en persona a su nutricionista, Giuliano Poser.
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El crack de Barcelona y la Selección Argentina no fue convocado para el partido ante Levante, por la penúltima fecha de la liga española, y aprovechó el fin de semana libre para avanzar en su puesta a punto pensando en Rusia 2018.
Aunque no ocultó su viaje, tampoco lo hizo público. Los fanáticos se encargaron de eso, luego de fotografiarse con el Diez en un restaurante.
Por consejo de Martín Demichelis, Messi acudió por primera vez a Poser luego de la final perdida en Brasil 2014, año en el cual el rosarino sufrió vómitos durante los partidos y lesiones musculares. El especialista le cambió la alimentación y eso mejoró su rendimiento.
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"Eliminó la comida procesada y la reemplazó por comidas ricas en vitaminas, cereales, verduras, pescado y aceite de oliva", contó el nutricionista en 2015. Además, dejó las gaseosas, azúcar y carnes rojas.
Leo llegaría a Buenos Aires el lunes para sumarse a los entrenamientos, ya con la lista de 23 confirmada.
