Tres empresarios argentinos forman parte del listado de involucrados en el escándalo de corrupción que sacude a la FIFA y al mundo del fútbol. Alejandro Burzaco, Hugo y Mariano Jinkis fueron imputados por la justicia de los Estados Unidos, en el marco de la megacausa que incluyó la detención de directivos del organismo en un hotel de Suiza.
Los argentinos tienen cargos en el departamento de marketing deportivo de la FIFA y están acusados de pagar 150 millones de dólares en sobornos y comisiones ilegales para obtener medios de comunicación y derechos de comercialización de torneos internacionales de fútbol.
Alejandro Burzaco es presidente de Torneos y Competencias y mantuvo una excelente relación con el fallecido expresidente de la AFA, Julio Grondona. Cuando su empresa perdió los derechos de televisación del fútbol argentino, los mantuvo para su comercialización en el extranjero. Ayer, Burzaco informó en su cuenta de twitter que estaba camino a Zúrich.
Hugo Jinkis es dueño de la empresa Full Play, que tiene los derechos de TV de la mayoría de las selecciones de Sudamérica. La firma nació en 1998 y hoy tiene a cargo las Eliminatorias Sudamericanas, la próxima Copa América de Chile y el Sudamericano Sub 17 de Paraguay. Mariano Jinkis es su hijo y vicepresidente de la empresa.