Julio César Toresani (51) se quitó la vida en la madrugada de este lunes. Fue hallado muerto en la habitación que las autoridades de la Liga de Fútbol de Santa Fe le habían acondicionado en su predio. Según trascendió, habría ingerido siete pastillas y, bajo los efectos, se ahorcó con el cable del aire acondicionado.
Este dramático hecho sacudió al mundo del fútbol en Argentina. Diego Maradona, con quien protagonizó una discusión en un partido entre Boca-Colón que se disputó en la Bombonera en 1995, se mostró desolado y escribió unas sentidas palabras en su cuenta de Instagram.
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“Pensar que lo quise pelear, y hoy lo lloro. Después de aquella famosa discusión, él vino a jugar a Boca, y fuimos grandes compañeros. Hablé muchas veces con él por teléfono. Yo pensé en traerlo como segundo mío. Lamentablemente, llegué tarde. No creí que fuese todo tan grave...”, comenzó diciendo El Diez.
Además, cuestionó la falta de empatía de Boca y River (clubes en lo que jugó el Huevo Toresani) e incluso de la AFA por “no dar apoyo a los futbolistas que pasan por esta situación”. “No creo que el caso de Toresani sea el único. Por otro lado, hay gente que conocía al Huevo mucho mejor que yo, y no hizo nada”, sentenció Maradona.
La famosa pelea con Diego Maradona
Aquel sábado 7 de octubre de 1995, Boca le ganó 1-0 a Colón con gol de Darío Scotto. Al finalizar el encuentro, Toresani se quejó ante las cámaras al ser expulsado en medio del partido: "Maradona manejó el partido. Él me echó de la cancha, me gustaría encontrarlo para ver si me repite en la cara todo lo que me dijo".
Por supuesto que estas declaraciones llegaron a oídos de Diego Armando Maradona, quien no dudó en contestarle y hasta lo invitó a pelear: "A ese muchacho Toresani, que no existe, le digo que vivo en Segurola y Habana 4310, séptimo piso. Que venga, y vamos a ver si me dura 30 segundos".
Todo quedó en una amenaza y el episodio jamás se concretó. Tiempo después, el exfutbolista de Santa Fe se sumó a Boca. Cuando Maradona regresó al plantel, todos le advertían a Toresani que el capitán campeón del Mundo con la Selección en México 1986 no se había olvidado.
Sin embargo, fueron grandes compañeros y la bronca quedó en el pasado. "Me dijo: 'Huevo, ya pasó, bienvenido a Boca. Te felicito y no hay rencores'. Y así fue. Es un gran tipo. Nunca se me ocurrió ir a Segurola y La Habana”, recordó años más tarde Julio Toresani en diálogo con TyC Sports.