Luego de sacudir el fútbol mundial al anunciar su renuncia a la Selección Argentina, Messi demostró que lleva los colores celeste y blanco en el corazón.
La Pulga aterrizó junto a sus compañeros el lunes por la noche en Ezeiza y pasó la noche en las instalaciones de AFA. Entremedio se hizo un tiempo para visitar la casa del Kun Agüero y posar para la foto con Domingo Blanco, jugador de las inferiores de Independiente.
Sin embargo, mucho más llamativa fue la segunda foto de Lio. En pleno clamor popular para que no abandone a la Selección, el astro agarró su auto y se fue manejando hasta su Rosario natal.
Uno de los empleados del peaje lo fotografió y reveló una pequeña sonrisa de Lionel, que otra vez lució la ropa de Argentina. A su lado, dormida, viajaba Antonella Roccuzzo.
Solo contra el mundo
Mientras comenzaban a circular las fotos de Messi, se viralizó otra imagen de la final ante Chile. Allí, el 10 lleva la pelota sin ningún compañero cerca y lo marcan siete rivales.