El mundo del fútbol se vio sacudido por la noticia de que Pelé falleció a los 82 años de vida. El astro del fútbol brasilero abandonó el mundo terrenal y dejó consigo un legado impresionante, en el que Córdoba tuvo una pequeña participación que vale la pena recordar.
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Las visitas más representativas de O Rei al territorio provincial tuvieron lugar en la Boutique de Barrio Jardín. Sin embargo, la primera vez que el crack pisó suelo cordobés fue en septiembre de 1962. En esa oportunidad, el histórico equipo del Santos hizo una parada en Deán Funes, en un viaje en tren con destino a Tucumán, en el marco de una gira por Argentina.
Las crónicas de la época reflejaron que Pelé practicó durante 15 minutos en un potrero de la zona, conocido como la "Cancha de los Manrique", quienes eran integrantes de la familia del encargado de la estación de trenes del ferrocarril.
Su vínculo con Talleres
Las dos incursiones de la leyenda brasilera en la Boutique de Barrio Jardín se dieron a través de una fuerte inversión por parte de las dirigencias de turno de la "T".
El 7 de marzo de 1964, el histórico Santos de Pelé pisó la cancha del Matador a cambio de 15.200 dólares, lo que era una fortuna para la época. Se vendieron más de 10 mil entradas y quien ya era bicampeón mundial hizo delirar a los presentes con pinceladas de su talento en el triunfo de 2 a 1 de su equipo.
Toninho y Pepe marcaron para el conjunto "Peixe", mientras que Armenante hizo lo propio para el Albiazul. Los medios de la época reflejaron que la visita jugó "a media máquina" y que no desplegó todo su poderío ante un Talleres que hizo un papel digno, con la "Wanora" Romero como una de sus principales cartas en ofensiva.
Seis años después, Pelé y su increíble Santos regresaron a Córdoba para un nuevo amistoso en el mismo escenario. Esta vez, la inversión para traerlos fue de 20 mil "billetes verdes" y requirió un esfuerzo de logística para traer a los jugadores albiazules, que se encontraban de vacaciones. Es que claro: el encuentro tenía fecha para el 18 de enero, plena época de descanso para los futbolistas de ese entonces.
Telegrama mediante, uno por uno de los futbolistas recibió el mensaje y acudió a la histórica oportunidad de enfrentar al que era, indiscutiblemente, el mejor de todos los tiempos (hasta ese momento, al menos). Cabe destacar que, hasta enero de 1970, O Rei ostentaba dos mundiales ganados (aunque en el segundo hubiera tenido poca participación) y se preparaba para la Copa del Mundo de México de 1970, que le daría su tercer estrella.
Ante 19 mil matadores que venían de festejar el título de Liga Cordobesa de su equipo en 1969, Pelé volvió a demostrar su jerarquía de a chispazos. Fue 2 a 0 para los brasileros con goles de Abel y Manoel María. Pero el resultado quedó en segundo plano ante una anécdota inolvidable.
Roberto "la Chancha" Cortez, mediocampista que estuvo presente en los dos cotejos ante el tres veces campeón del mundo, tuvo la dicha y el honor de hacerle un "cañazo" al mismísimo O Rei. "En una jugada Pelé me persiguió de atrás y yo, sin saber que era él, le metí un caño", recordó en una entrevista a La Voz.
"Sentí un griterío en la cancha y cuando me di vuelta lo vi sacudirse la tierra de la camiseta, porque se fue de boca al piso. La cancha se venía abajo", agregó esta gloria de la "T".
Su última visita
El 6 de junio de 1978 estuvo por última vez en la capital cordobesa. Fue en un partido entre Alemania Federal y México, en lo que fue triunfo germano por 6 a 0. Pelé acudió a la cita para hacer las veces de comentarista para la cadena Televisa del país azteca.
En aquella oportunidad, cuando el astro brasilero llegó a la zona de prensa del flamante Chateau Carreras, la voz del estadio anunció su presencia, lo que despertó una gran ovación en todo el estadio.