Tres días después de la horrorosa tragedia aérea en Colombia, Jackson Follman, el arquero suplente del Chapecoense, es el sobreviviente que más grave es encuentra. Este jueves, los médicos volvieron a operarlo y aún corre riesgo de que lo tengan que amputar una vez más.
Horas después de la caída del avión, Follman perdió la pierna derecha. Si bien es el herido más grave, se mantiene estable.
Cómo están los compañeros
Neto, rescatado cuando casi no había esperanzas de encontrar a más sobrevivientes, tiene un panorama más alentador. Desde la clínica San Juan de Dios informaron que podría volver a jugar al fútbol siempre y cuando no sufra daños neurológicos.
El otro futbolista del Chapecoense es Alan Ruschel, de quien también se temió que quede parapléjico. Por fortuna, tuvo "movimientos normales en los miembros superiores e inferiores", según el parte médico. También tiene buenas chances de reponerse por completo, al menos en lo físico.
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Los otros heridos
El periodista Rafael Henzel presenta un trauma toráxico y tiene la pierna fracturada, lo que lo mantiene en estado crítico. Las perspectivas son "optimistas". Por último, los tripulantes Ximena Suárez y Erwin Tumiri están casi recuperados y podrían recibir el alta entre este jueves y el viernes.