En el marco del anuncio del decreto de necesidad y urgencia (DNU) por parte del presidente Javier Milei, el fútbol argentino se vio sacudido por una de las 30 medidas comunicadas. Se trata de la “modificación de la Ley de Sociedades para que los clubes de fútbol puedan convertirse en sociedades anónimas si así lo quisieran”.
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Lo que en su momento fue una opinión en diferentes programas periodísticos mutará en realidad. De esta manera, con lo anticipado por el mandatario las entidades deportivas tendrán la posibilidad de "privatizarse" y dejar atrás su condición de asociaciones civiles sin fines de lucro.
A partir de allí, surgen algunos interrogantes que vale la pena repasar: ¿Qué son las Sociedades Anónimas Deportivas? ¿Cómo fueron las experiencias de este modelo alrededor del mundo? ¿Cuáles son las posturas de Talleres, Belgrano e Instituto?
¿Qué son?
Las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) se basan en el lucro, en pos de los beneficios individuales y ganancias. Los principales dueños de los clubes bajo este modelo son inversionistas.
En este contexto, los socios no participan en la toma de decisiones relacionadas al club, ya que la responsabilidad recae completamente en los accionistas, que pueden ser empresas, individuos o entidades, a través de la representación en un Consejo de Administración.
Para respaldar sus operaciones, este modelo avala la atracción de capitales extranjeros y la opción de cotizar en bolsa para financiar sus actividades.
+ Rechazo de la hinchada de Independiente Rivadavia de Mendoza.
¿Cómo fueron las experiencias en el mundo?
Si se tiene en cuenta el ejemplo que planteó Milei en algunas entrevistas, está claro que admira el modelo inglés. En el fútbol de Inglaterra todos los equipos de la Premier League son sociedades anónimas, y en muchos de esos casos los capitales extranjeros desembolsan cantidades monstruosas de dinero para revalorizar las entidades.
Quizás el caso más emblemático sea el del Manchester City, un histórico del Reino Unido que había caído en desgracia y que había quedado a la sombra de su clásico rival, el United. De un día para el otro, en 2008, el jeque Mansour, miembro de la familia real de Emiratos Árabes, compró las acciones del conjunto cityzen por 250 millones de euros.
+ Pep Guardiola junto al jeque Mansour.
A partir de allí, pudieron contratar a los mejores jugadores y técnicos para poner al club en la primera plana de Europa, que lo tuvo como campeón de la Champions League en 2023.
Caso similar al del Manchester City fue el del Chelsea que, a partir de la aparición en escena de los billetes del ruso Roman Abramovich, salió de la intrascendencia en el fútbol inglés para transformarse en uno de los integrantes del llamado "Big Six", los seis equipos más importantes de la liga, junto con el City, Manchester United, Arsenal, Liverpool y Tottenham.
Los casos se multiplican en Europa, tales los ejemplos de Paris Saint Germain, Inter de Milán, Atlético de Madrid, Valencia, Newcastle, entre otros. Sin embargo, son muchos los clubes que adoptaron este modelo y tuvieron gravísimos problemas económicos. Varios incluso desaparecieron.
Logroñés, Salamanca, Extremadura, Badajoz, en el fútbol español, dejaron de existir bajo el modelo de las SAD. El Málaga es otro caso de una sociedad anónima que llevó al primer equipo a pelear en lo más alto de Europa y ahora compite en la tercera división.
+ La cancha del desaparecido Extremadura.
En Italia, clubes importantes como Fiorentina, Napoli y Parma estuvieron a punto de desaparecer por las deudas.
En México y Brasil también rigen leyes a favor de las SAD, con grupos empresariales que invierten en los equipos y han obtenido jugosos resultados deportivos, aunque también se han endeudado problemáticamente.
Otro ejemplo de este modelo es el del fútbol chileno. En mayo de 2005 se promulgó en el país trasandino la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales. Actualmente, de los 45 equipos entre las primeras tres divisiones, 42 pertenecen a capitales privados. Solo Cobresal Curicó Unido y Puerto Montt son los únicos que no se alinearon bajo esa modalidad.
En cuanto al fútbol alemán, la implementación podría ser calificada como un híbrido, ya que conjuga la concepción de sociedad anónima con la de asociación civil sin fines de lucro. Allí se aplica la llamada "Regla 50+1", en la que la mitad más uno de los derechos de voto tiene que estar en manos del club y sus socios.
La regla está diseñada para garantizar que los socios del club conserven el control general, protegiendo a los clubes de la influencia de los inversores externos.
+ Borussi Dortmund, uno de los equipos más populares de Alemania.
Posturas en Córdoba
Las aguas respecto al tema están divididas en los tres equipos más populares de la Docta. Por su parte, Belgrano e Instituto se pronunciaron en contra de las privatizaciones en el fútbol argentino. Junto con varios clubes, a principios de noviembre las tres entidades apoyaron el concepto de asociaciones civiles sin fines de lucro.
"El Club Atlético Belgrano, tal como lo establece su historia, identidad y el estatuto de nuestra institución, ratifica su carácter de asociación civil. El destino del Club le pertenece a sus socios y socias", tuiteó la cuenta oficial del Pirata.
Instituto comunicó el siguiente mensaje: "Instituto A.C.C. ratifica su carácter de Asociación Civil sin fines de lucro contemplado en el estatuto que rige la vida del club. Como recalcó nuestro Presidente Juan Cavagliatto en la última Asamblea: 'El club es y será de sus socios'".
En cuanto a Talleres, no hubo comunicado oficial respecto a la iniciativa de muchos clubes del país de aquel 11 de noviembre. Es sabido que el presidente del Matador, Andrés Fassi, simpatiza con la idea de las sociedades anónimas en el fútbol.
"De las 30 ligas más importantes del mundo, Argentina es la única que no acepta las sociedades anónimas. Dentro del fútbol se necesita un cambio radical y habrá que ver cuál es de acuerdo a la idiosincracia. Pero debería haber normas y transparencia", supo declarar en un congreso de fútbol en 2016.
+ Andrés Fassi, a favor de las sociedades anónimas en el fútbol.