El Reino Unido es uno de los países del mundo que más está siendo golpeado por el coronavirus. Más de 500 personas están muriendo por día en las últimas jornadas y exigen a todos que se queden en sus casas para evitar más contagios y tragedia.
En medio del aislamiento, el defensor del Manchester City y de la Selección de Inglaterra, Kyle Walker (29), no cumplió con la ley y contrató a dos prostitutas. Las mujeres fueron a su departamento, donde también estaba un amigo del futbolista.
Una de las trabajadoras sexuales fue quien reveló el escándalo cuando vio que el jugador, en la mañana siguiente, envió un mensaje a los hinchas para pedirles que no salgan de sus casas. Louise McNamara, de 21 años, incluso tomó algunas fotos de Walker.
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La joven contó que trabaja para una agencia y que su jefe le dijo que un “cliente de alto perfil estaba buscando a alguien con clase”. McNamara fue en taxi hacia el departamento del futbolista y allí se encontró con que también había otra chica, una brasileña de 24 años.
Según contó, llegaron cerca de las 22:30 y se fueron tres horas después. McNamara le dijo a The Sun que en un principio no sabía quién era, y que fue la mujer brasileña quien le explicó que Walker era un futbolista.
En una de las imágenes que la joven hizo públicas se lo ve al defensor abriendo la heladera y en la otra contando el dinero para pagarles. McNamara aseguró que les pagó 2.200 libras (unos 2.500 euros).
Horas después, en la mañana del miércoles, Walker dio una entrevista en donde pedía a la población que respete los protocolos, se lave las manos y cuiden a sus seres queridos.
“Es un hipócrita, que pone a las personas en riesgo. Por un lado invita a extraños a tener relaciones sexuales, y al otro día da una conferencia sobre la necesidad de mantenerse a salvo”, criticó McNamara.