"Hola, soy Santiago y les voy a contar mi experiencia". Con la inocencia emanando de cada sílaba, el niño de diez años de la localidad cordobesa de Pilar se presentó con naturalidad al frente de la cámara. Su mamá Estela lo filmaba y moría de amor mientras su hijo relataba una tierna historia.
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Como millones de chicos (y no tan chicos) en el mundo, el pequeño protagonista buscaba el álbum de figuritas del Mundial de Qatar 2022. En el marco de una situación económica complicada, las chances de conseguir el ansiado libro de colección resultó casi una utopía. Eso se sumó a la poca disponibilidad del producto, que llevó al Gobierno a tratarlo como una política de estado.
"Como se complicaba conseguirlo, hice mi propio álbum, después de conseguir las figuritas falsas en una feria. Decidí crearlo con lo que tenía", relató Santiago en el video que grabó su mamá.
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Lleno de optimismo, el niño agregó: "Espero que los que no puedan comprarlo hagan uno porque es lo mismo, se van a divertir igual. La idea es que no se desanimen".
Las vueltas de la vida hicieron que el cuñado de Santiago, "Nacho", le regalara el álbum oficial. "Tres días después de que yo haga el álbum casero, mi amigo 'Nacho' me hizo ese regalo", explicó, invadido de gratitud.
Amor de madre
En diálogo con ElDoce.tv, mamá Estela demostró su pesar por no haberle conseguido el producto tan deseado. Pero el orgullo que sintió por la actitud de su hijo pudo más. "Cuando me mostró el álbum que había hecho me sentí mal, porque entre una cosa y otra no se lo podía comprar", explicó la mujer.
"La verdad, a mí no se me hubiera ocurrido hacer uno casero, pero me pone feliz que se le ocurran esas cosas. Tiene mucha imaginación", afirmó, emocionada.
Además, contó el profundo sentimiento de Santiago por el fútbol, como así también su probada capacidad para no desanimarse ante la adversidad: "Él ama el fútbol. Aunque no lo pongan seguido en su equipo él le pone la mejor cara, siempre".
El pequeño coleccionista juega de lateral izquierdo en Central Córdoba de Pilar y no le tiembla el pulso para calzarse los guantes e ir al arco. "Es muy compañero", afirmó Estela.
Su inocencia infantil y su deseo de motivar a otros chicos que no tienen álbum se tradujeron en el video que su madre compartió a ElDoce.Tv: "Cuando le pregunté si quería hacer un video contando cómo había hecho el álbum, automáticamente me dijo que sí".
Con timidez pero también con firmeza, Santiago habló con este medio y contó entusiasmado que intercambiaba figuritas con sus compañeros de colegio. Sin embargo no hubo tiempo para más: el pequeño futbolero tenía práctica y así prepararse para una cita impostergable con la "redonda". "No falto nunca", aseguró.
La pasión se le sentía en la voz cuando hablaba de fútbol. El mismo que lo llevó a rebuscárselas cuando no podía conseguir el tan ansiado álbum del Mundial.