La final de la Copa Argentina dejó un sabor amargo en los hinchas de Talleres. Miles viajaron a Santiago del Estero y el resto alentó desde Córdoba, pero la definición por penales fue para Boca, y el sueño de volver a ser campeón no pudo ser.
Más allá del resultado, el pueblo albiazul coincidió en palabras como "orgullo" y "agradecimiento" por haber vivido un momento tan especial el miércoles pasado.
Como era de esperarse, antes del trascendental duelo comenzaron a conocerse historias de fanáticos que dejaron todo por ver a Talleres, como el hincha que viajó al Estadio Madre de Ciudades a horas del nacimiento de su hija.
Algo parecido ocurrió con Lucas, otro fanático del Matador, al punto de tener una colección de 152 camisetas originales. Por una promesa hecha hace dos años, el miércoles fue a Santiago del Estero con su entrada, pero se quedó afuera del estadio.
Una madrugada de 2019, su hermana lo llamó y le contó que a su madre "se le había parado el corazón" y que "estaba funcionando al 30%". A Lucas se le vino el mundo abajo, creyó que su mamá moría.
Muy creyente, entre lágrimas realizó una promesa clave en su vida: si su madre se curaba, él dejaba de ir a ver a su querido Talleres. La mujer recibió un marcapasos cardíaco y su salud empezó a mejorar paulatinamente.
Desde ese día, Lucas jamás volvió a la cancha. "Nunca dejé de pagar el carnet de socio, ni siquiera en la pandemia. Hace seis meses nació mi segundo hijo, Tomás, que ya es socio de la T también", explicó a ElDoce.tv.
+ MIRÁ MÁS: Andrés Fassi tras la derrota con Boca: posibles refuerzos, el técnico y la Copa Libertadores
"Puede jugar Talleres contra el Barcelona, que lo mismo no voy a ir", agregó. Pero Dios le puso la prueba más difícil esta semana. El club de barrio Jardín volvió a una final y Lucas entró en una encrucijada que nunca pensó enfrentar.
"Compré la entrada a 10 mil pesos y viajamos a Santiago con amigos y mi hermana. Llegamos a las 3 de la tarde, pasamos por el camping y después al estadio. Te juro que pensé en entrar, me moría de ganas, pero iba a tener cargo de conciencia", relató Lucas.
Efectivamente el joven se quedó en las inmediaciones del Madre de Ciudades. Increíble pero real. "Sabía que mi hermana no iba a querer entrar, así que la empujé y al final ingresó", contó el fanático.
Ya a la hora del partido, a Lucas se le quedó sin batería el celular y salió a buscar una radio por ahí: "Encontré a unos locos que lo estaban escuchando y me quedé ahí con ellos".
Un dato no menor es que al ticket no lo vendió, sino que ahora lo plastificará y guardará de recuerdo: "Nunca pensé ni fui con la idea de hacer dinero".
Talleres perdió, pero él se siente "orgulloso" de lo que hizo su equipo. Ahora anticipó que el domingo, cuando el Albiazul enfrente a Independiente, su bebé de seis meses irá por primera vez a la cancha. "Ya le dije a mi viejo que lo lleve con él", manifestó.
Él seguirá cumpliendo su promesa "hasta que no tenga más a mi vieja". "Ojalá nunca me falte ella, pero ese día llegará y recién ahí voy a volver a ver a Talleres. Es lo que sentí. La vieja es la vieja", cerró su relato el hincha más hincha de la T.
+ VIDEO: el encuentro de Lucas y su mamá en Telenoche: