Después de un mes internado, el papa Francisco mostró signos de mejoría mientras sigue tratado a raíz de una diagnóstico de neumonía bilateral. Así quedó reflejado en un parte médico difundido este sábado por el Vaticano.
“Las condiciones clínicas del Santo Padre permanecen estables, confirmado los progresos mostrados en la última semana”, destacó el comunicado sobre la situación de Jorge Bergoglio, quien permanece en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma desde el 14 de febrero.
+ MIRÁ MÁS: “Volvimos a nacer”: el crudo relato de la familia argentina que naufragó en el Caribe
En el parte indicaron que “la oxigenoterapia de alto flujo continúa, reduciendo gradualmente la necesidad de ventilación mecánica no invasiva por la noche”.
“El Santo Padre requiere aún terapia médica hospitalaria, fisioterapia motora y respiratoria”, afirmaron, a la vez que subrayaron que “estas terapias, por el momento, muestran una nueva mejoría gradual”.
Voceros de la Santa Sede indicaron que el pontífice transcurrió “la mayor parte del día entre la terapia, la oración, el descanso y un poco de trabajo”.