La cifra de víctimas llegó a 51 personas fallecidas y 69 heridas por un atentado con bomba en una fiesta de casamiento. El ataque ocurrió en la importante ciudad de Gaziantep en el sur de Turquía.
El gobernador de la provincia, Ali Yerlikaya, definió el suceso como un "atentado terrorista" y aclaró que la explosión tuvo lugar en una boda en el centro de la ciudad poco antes de la medianoche. Posteriormente, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, condenó el ataque a través de un comunicado.
Las fuerzas de seguridad explicaron que el suicida hizo estallar la carga explosiva que llevaba en una mochila cuando la gente se encontraba divirtiéndose en la fiesta.
La ciudad está ubicada a unos 50 kilómetros de la frontera con Siria, lugar de retaguardia para numerosos movimientos armados. Autoridades turcas especularon que el Estado Islámico podría estar detrás del ataque.
País golpeado. El sureste de Turquía fue blanco esta semana de tres atentados que dejaron 14 muertos. El gobierno de Recep Tayyip Erdogan los atribuyó a la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán, el PKK kurdo, aunque no está claro quién fue responsable.
Esta misma semana un atentado en Alepo dejó una imagen desgarradora de un niño herido.