Corea del Norte es posiblemente la sociedad más aislada y censurada del mundo. En las últimas horas se conoció un nuevo decreto del líder Kin Jong-un por conmemorarse el décimo aniversario de la muerte del fallecido gobernante Kim Jong-il.
A raíz de este suceso, desde este viernes comenzará el luto obligatorio y general en todo el territorio, el cual incluirá la prohibición de reír, llorar y tomar alcohol durante el lapso de 11 días.
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Para la comunidad coreana, esta fecha no es festiva. Generalmente, el luto dura una semana, pero en este caso será más extenso que en otras ocasiones. La orden de las autoridades es que los ciudadanos no pueden festejar ni mostrar signos de felicidad o alegría durante ese período.
“Las personas tienen prohibido reír, beber alcohol o realizar actividades de ocio que puedan denotar un acto de festejo o esparcimiento”, informaron fuentes, quienes agregaron que las fuerzas de seguridad estarán controlando estrictamente a la ciudadanía para que cumplan el luto.
Según comentaron las mismas fuentes, existen antecedentes de que años anteriores las autoridades norcoreanas arrestaron a todos aquellos ciudadanos que se encontraban alcoholizadas o intoxicadas durante el duelo y fueron acusados de ser criminales ideológicos.