Un adolescente de 15 años confesó un triple crimen. Mató a su madre, a su padre y a su hermano de 10 años luego de haber tenido una discusión con ellos. Ocurrió en la ciudad de Elche, España.
Según los medios locales, el joven tenía malas notas en el colegio y no colaboraba con las tareas agrícolas de la familia. Fue por eso que sus padres decidieron ponerle un castigo: le cortaron el acceso a internet. A raíz de esa situación, el adolescente quedó fuera de sí.
Agarró una escopeta de caza y comenzó a disparar. Primero fue por su madre, luego por su hermano y, por último, su padre que al principio no estaba, pero lo esperó. Una vez que estuvieron todos muertos, agarró los tres cuerpos y los puso en un cobertizo.
+ MIRÁ MÁS: Estados Unidos: utilizaron ADN para cerrar un crimen que estuvo 60 años sin resolver
Luego de tres días, la policía encontró al joven solo en la casa con los cadáveres. "La hermana de la madre acudió a la casa porque no tenía noticias de la familia y fue entonces cuando su sobrino le dijo que había matado a su padre, a su madre y a su hermano", detalló un portavoz de las fuerzas de seguridad.
Tras tomarle declaración al adolescente, destacaron "su frialdad" y “serenidad fuera de lo normal". Además, aseguraron que "no expresó remordimientos". Éste pasó dos noches en un calabozo especial para menores en la Comisaría de Elche y después quedó a disposición de la Fiscalía de Menores.
La casa donde se desató el asesinato de la familia.