El Hospital Oliveira de Azeméiz, ubicado en la localidad de Santa María da Feira (al norte de Portugal), cometió un grave error. Dio por muerto a un hombre de 92 años que había sido internado por problemas respiratorios y sufría de coronavirus.
Los médicos notificaron a los familiares del paciente, quienes organizaron el entierro sin siquiera poder verlo debido a los protocolos sanitarios. Sin embargo, 20 días después las autoridades sanitarias volvieron a comunicarse con los parientes para avisarles de la equivocación.
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Según detalló el diario local Jornal de Noticias, el internado se encontraba con vida pero fue confundido con el cuerpo de una mujer que sí había fallecido. Ella fue quien fue enterrada en su lugar.
Sobre el incidente, uno de los hijos del hombre declarado muerto, aseguró: "Los médicos del hospital vinieron a hablar conmigo diciendo que había un error y que mi padre estaba vivo. Pidieron que lo confirmara y se disculparon por el error. Sé que en estos momentos los médicos tienen mucho trabajo, pero espero que este acontecimiento sirva para que haya más cuidado en el futuro".
Un sistema colapsado
La tercera ola del Covid-19 ha colocado al país ibérico entre los de mayor índice de contagios y muertes por millón de habitantes. Tiene un acumulado de 711.018 infectados (de los cuales 180 mil siguen activos) y 12.179 fallecidos.
Frente a este escenario, el canciller de Austria, Sebastian Kurz, anunció que su país acogerá a pacientes portugueses en Unidades de Cuidados Intensivos.
Según dijo el funcionario a través de su cuenta de Twitter: "La pandemia de coronavirus plantea enormes desafíos a todos los países europeos. Es una exigencia de la solidaridad europea ayudar de forma rápida y sin burocracia para salvar vidas".