Para Donald Trump, los empleos son más importantes que la regulación del cambio climático. Es el principal argumento que dio el presidente de Estados Unidos para dejar sin efecto una serie de medidas implementadas por Barack Obama.
El mandatario puso fin a lo que él llamó la "guerra al carbón". "Vamos a poner a nuestros mineros a trabajar otra vez", aseguró Trump, rodeado de un grupo de empresarios de la minería, antes de firmar el decreto en la Agencia de Protección Ambiental.
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La orden ejecutiva anula al menos seis iniciativas de su predecesor que buscaban frenar el cambio climático y regular las emisiones contaminantes, según Univisión. Además, ordena "identificar todas las regulaciones (...) que obstaculicen y representen impedimentos para la independencia energética de Estados Unidos".
"Creo que el presidente ha sido muy claro en que no va a aplicar políticas de cambio climático que pongan a la economía de Estados Unidos en riesgo. Es muy simple", informó un funcionario de la Casa Blanca, según CNN.