La microcefalia provoca que los bebés nazcan con la cabeza más chica de lo normal. Y el crecimiento de esta enfermedad esa es la principal evidencia de que el virus del zika está dejando su huella en Brasil.
En el país vecino, había entre 100 y 120 casos de microcefalia por año. Pero la aparición del maldito mosquito aedes aegypti con el virus del zika multiplicó 30 veces ese número. Es que si la madre es picada, lo más probable es que su hijo nazca con esta afección.
Hay distintos grados de microcefalia y los niños pueden sufrir retrasos del desarrollo cognitivo, dificultad en la coordinación y equilibrio y distorsiones faciales.
El Hospital Oswaldo Cruz de la ciudad de Recife atendió numerosos casos en los últimos días. La agencia internacional Reuters publicó fotos que muestran el drama y las secuelas del zika.
Advertencia: las imágenes pueden afectar a personas sensibles