Christopher Roybal es uno de los 59 asesinados por Stephen Paddock, el sanguinario asesino de Las Vegas que abrió fuego desde un hotel hacia el público de un recital de música country. Tras la difusión de los nombres de las víctimas, su historia comenzó a viralizarse.
Durante cinco años, Roybal fue un infante de la marina norteamericana que luchó en Afganistán. De la polémica guerra en ese país salió ileso, pese a combatir en reiteradas veces con los talibanes.
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Precisamente, el pasado 18 de julio compartió un posteo en Facebook que hoy cobra un sentido aún más fuerte. "¿Cómo es que te disparen?", se titula el texto, en el que explica que "ser disparado es una pesadilla de la que ninguna cantidad de drogas, ninguna terapia ni ninguna borrachera con tus compañeros veteranos de combate te hará posible escapar".
Cumpleaños y horror
Como estaba próximo a festejar sus 29 años, el ex soldado fue junto a su madre al Harvest Festival de Las Vegas. Durante el show se separaron por unos instantes, momento en el que comenzó la balacera desde el piso 32 del hotel Mandalay Bay.
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Su propia madre fue consultada por la prensa y relató el terrible final. "Dicen que mi hijo dijo: 'estoy herido'. Le dieron en el pecho. Y cuando se agacharon todos, por la metralleta, él se agachó y cayó para atrás. Ahí quedó", le dijo Debbie Allan al canal Univisión.
"Mi hijo fue lo mejor que tuve en mi vida. Fue mi primer todo. Era bello. Era un hombre tan increíble, chistoso, le encantaba cantar. Estuvo en combate y regresó sin heridas, y vino a un concierto y murió", lamentó la mujer.