Como si la masacre de Oregon -que dejó 10 muertos y varios heridos en una escuela- no hubiese sido suficiente, otro ataque conmociona al país del norte.
En horas de la noche, mientras los vecinos de Inglis, Florida, seguían las novedades de la tragedia del día, fueron sacudidos por otra balacera. De acuerdo a los primeros reportes, una discusión doméstica terminó con un adulto armado disparando en varias oportunidades.
La Policía informó que las víctimas fatales fueron dos y se investigan los detalles del hecho. El atacante se suicidó, mientras que un herido fue trasladado de urgencia al Hospital.
La nueva masacre también sucede luego de que el propio presidente de Estados Unidos, Barack Obama, critique al Congreso (dominado por los republicanos) por la falta de leyes para prevenir la venta libre de armas.