Después de una larga jornada de más de 10 horas, el Supremo Tribunal Federal de Brasil rechazó, por seis votos contra cinco, un recurso de hábeas corpus presentado por Lula da Silva para evitar su encarcelamiento antes de agotar todas las instancias judiciales.
Fue la presidenta del máximo tribunal, Cármen Lúcia, quien desempató, falló en contra y dio luz verde a su detención. De esta forma, autorizó a que el expresidente brasilero pueda cumplir su condena de 12 años y un mes por corrupción.
+ MIRÁ MÁS: La condena de primera instancia a Lula da Silva
Sin embargo, no irá a prisión de manera inmediata, porque tiene hasta el 10 de abril para presentar un nuevo recurso y seguir apelando su condena en libertad. De todas formas, expertos aseguran que hay muchas probabilidades de que quede tras las rejas la próxima semana, a sus 72 años.
Esto fue un verdadero golpe para el líder del Partido de los Trabajadores, porque su candidatura quedaría en riesgo, aun estando primero en las encuestas para las elecciones. Lula quedó a un paso de la cárcel por aceptar un departamento de una constructora involucrada en los sobornos de Petrobras, conocidos como Lava Jato.