El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva aceptó asumir el cargo de jefe de Gabinete del gobierno de Dilma Rousseff, es decir, titular de la Casa Civil.
De esta forma, desplazará a Jaques Wagner, quien asumirá una secretaría ejecutiva. La razón por la que decidieron incorporarlo es lograr “la estabilización del gobierno”, tras la marcha que se realizó pidiendo la renuncia de Rousseff.
Si bien Lula Da Silva es investigado por el juez Sergio Moro, en el marco de la megacausa por corrupción en la empresa estatal Petrobras, delito de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, de ahora en adelante la Corte Suprema será la responsable de juzgarlo, de acuerdo a la ley brasileña.
De esta forma, se dilatará el proceso y dará más tiempo el Ejecutivo. Por su parte, la oposición presentó ante un tribunal de Brasilia que la Justicia impida el nombramiento del ex mandatario como ministro.