El derrumbe en Asia, encabezado por Shanghai, que cerró con una caída cercana al 9%, arrastró a los mercados del mundo.
Así las plazas europeas cayeron más del 5% y Wall Street, San Pablo y la bolsa porteña abrieron con fuerte baja.
El Nikkei de la Bolsa de Tokio cerró la jornada con una pérdida del 4,61%, cayendo a su nivel más bajo en seis meses, tras cinco sesiones consecutivas en rojo.
La situación demostró que las intervenciones del gobierno de Pekín desde hace semanas en los mercados han sido poco efectivas.
La ola de contagio llegó hasta Europa, donde las principales plazas bursátiles abrieron con pérdidas de alrededor del 2,5%, que se profundizaron con el paso de las horas. La Bolsa de París fue la más afectada.
Wall Street también tuvo un inicio de semana complicado. Lo mismo aconteció en los mercados financieros latinoamericanos que se vieron arrastrados por el desplome en su apertura. México, Brasil y Argentina fueron los más perjudicados.