Cada vez que comienza la estación primaveral, muchos estudiantes universitarios parten hacia Florida para festejar sus vacaciones, conocidas popularmente como “Spring break” (descanso primaveral), donde disfrutan del buen clima del sur del país. Luego de unos largos días de fiesta en la zona conocida como “Miami Beach”, el alcalde de la ciudad, Dan Gelber, tomó la decisión de declarar estado de emergencia e imponer el toque de queda, que entró en vigencia el sábado pasado.
Encargados de esa zona, afirman que la cantidad de gente que arribó a esos lugares era mayor a la que ellos podían manejar. A su vez, señalaron el mal comportamiento de los jóvenes estudiantes, al decir que ellos se trasladaban allí con la intención de no cumplir las reglas, generando una crisis imposible de controlar.
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De esta manera, en horas de la costa Este de Estados Unidos, queda impuesto el toque de queda a partir de las ocho de la tarde en la Zona Miami Beach, donde converge una gran cantidad de rubros, desde restaurantes y bares, hasta lugares de entretenimientos.