A casi diez años de la desaparición de Madeleine McCann, el ministerio del Interior británico lanzó un fuerte operativo para lograr dar con un hombre que podría aportar la solución al misterio de la pequeñita que estaba por cumplir 4 años y desapareció en un hotel de Praia da Luz, Portugal. Los padres de la nena la habían dejado durmiendo en la habitación con sus hermanitos mientras iban a cenar con amigos.
Este hombre, que sería de origen portugués, trabajó en el exclusivo resort Ocean Club y fue investigado por detectives que investigan la causa desde sus comienzos. "Hay sólo un hombre con el que los detectives quieren hablar, que estaba cerca del área donde desapareció Maddy. Una búsqueda internacional se lanzó para encontrarlo", dijo una portavoz, y aclaró que "es el último lanzamiento de dados".
De acuerdo a Nicolla Wall, el inspector en jefe que dirige la investigación, el sospechoso es identificado en el expediente como "persona de interés". "Guarda secretos", declaró otra fuente de la investigación.
Para hallarlo se han ofrecido 100 mil dólares. La búsqueda se realiza en todo el planeta a través de las agencias de inteligencia internacionales. Mientras tanto, los padres de Maddie, Kate y Gerry McCann, afirman estar convencidos de que su hija, desaparecida en mayo de 2007, aún está con vida.