Las redes sociales cumplen con el formato perfecto para que los pervertidos acosen a sus víctimas. El sexting es una de las modalidades más usadas y, muchas veces, termina en acoso sexual cuando no hay un vínculo entre ambas personas.
Jessica Davidson comenzó a recibir fotos sensuales de una persona que conocía desde hace tiempo, quien también le pedía que le envíe imágenes suyas semidesnuda.
Inmediatamente le contó a su novio, Karl Hughes, de lo que estaba ocurriendo y pensaron cómo terminar con semejante perversión. Después de que el hombre la amenazara, Karl decidió actuar y le dio su merecido de una manera grotesca y muy original.
Fue así como intercambiaron sus roles y se vengaron. “¿Quieres que te envíe algunas fotos mías en ropa interior?”, le preguntó la pareja de Davidson, haciéndose pasar por ella. Por supuesto, cayó en la trampa: se encontró con el abdomen prominente y tatuado de Hughes luciendo una bombacha, peluca y una cartera.