Un tremendo terremoto sacudió la costa central de Ecuador dejando, hasta el momento, un saldo de al menos 570 personas muertas, miles heridas y cientos desaparecidas.
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional, encargado de la actividad sísmica y volcánica en Ecuador, informó que el movimiento tuvo una magnitud de 7,8 grados en la escala de Richter y que hubo más de 60 réplicas, de entre 2,5 y 5,3 grados, durante las seis horas posteriores.
El gobierno declaró el estado de excepción en seis provincias y el vicepresidente Jorge Glas aclaró que la cifra de víctimas fatales podría aumentar por los graves daños materiales provocados por el temblor.
Los videos muestran la desesperación de los ecuatorianos en el momento del fuerte sismo:
El terremoto tuvo como epicentro la zona costera entre los balnearios de Cojimíes y de Pedernales, a 170 kilómetros de la capital Quito. Se trata del movimiento sísmico más fuerte en Ecuador desde el año 1979.
El cordobés Luis Juez, embajador argentino en el país, confirmó que, hasta ahora, no hay reportes de víctimas argentinas. "Hasta el momento no fueron confirmadas víctimas, ni lesionados o desaparecidos argentinos", indicó el ex senador al canal TN.
El gobierno habilitó 300 millones de dólares de fondos de contingencia. 3.500 policías fueron enviados a las provincias de Manabí, Esmeraldas, Guayas y Santa Elena. Además, 10.000 efectivos de las Fuerzas Armadas y médicos del Sistema de Salud nacional trabajan en los lugares más afectados.
El presidente Rafael Correa se encontraba en Roma y envió mensajes de apoyo a los ciudadanos a través de su cuenta de Twitter.