¿Los argentinos somos personas a las que nos gusta planificar?, ¿Nos sentamos en diciembre en la mesa familiar, charlamos sobre lo que nos pasó ese año, lo que hicimos bien y mal, lo que podemos corregir, y proyectamos lo que vamos a hacer el año próximo para mejorar la armonía familiar, los ingresos, las horas de placer y diversión? ¿O simplemente vivimos el día a día, a lo que vaya saliendo?