Patricio Eduardo Serrano quedó en el centro de la polémica luego de presentar un proyecto en la Legislatura para reconocer a David DePatie, el creador de la Pantera Rosa.
Después de que ElDoce.tv exponga la curiosa presentación, que llegó a los principales medios nacionales, el legislador provincial no dio ninguna explicación. En el repaso de su trayectoria, asomaron datos llamativos.
Su perfil en la Legislatura no informa títulos académicos y confirma que tiene 6 empleados a cargo. ¿El sueldo? Como todo legislador, recibe una remuneración mensual de bolsillo entre 240 y 250 mil pesos.
Serrano tiene mandato hasta 2023, año en el que completará 20 años con cargos en el Estado. Arrancó en el Ministerio de Salud, fue coordinador de Emergencia Social y pasó por Defensa Civil, entre otros.
Antes de ser legislador, se desempeñó como concejal de la ciudad de Córdoba en el período 2011-2015.
Milita desde joven en el peronismo y responde políticamente a Alejandra Vigo. En la interna del PJ capitalino sostienen que es más viguista que schiarettista, al ser uno de los dirigentes que sigue sin chistar los dictados de la flamante senadora nacional electa y esposa del gobernador.
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En su condición de legislador, integra el Tribunal de Conducta Policial en representación del oficialismo.
En esa tarea, tuvo participación en la decisión de permitir que el policía Lucas Gómez sea reincorporado a tareas operativas y portación de armas luego de haber sido separado de la fuerza por estar acusado de encubrir a un violador serial en La Calera.
Unos meses después de esa decisión, Gómez fue uno de los que disparó contra el auto en el que iba Valentino Blas Correas, quién falleció a consecuencia de los disparos.
Gómez está preso y es el principal acusado de asesinar a Blas. La presidenta del Tribunal de Conducta policial, Ana Becerra, está imputada por la reincorporación de Gómez.
Serrano guardó silencio en una reunión de comisión legislativa a la que fue el papá de Blas y en la que se apuntó directamente sobre la responsabilidad del Tribunal de Conducta.
Sorpresivamente, de esa reunión no quedó ningún registro porque hubo una decisión del oficialismo de no grabarlo ni permitir el acceso a la prensa.
Pasado complicado
Es de los legisladores que casi no habla y su función está más ligada a ser puntero territorial que generador de proyectos.
Una de las pocas veces que Serrano tuvo trascendencia pública fue por un motivo poco feliz: en 2014, cuando era concejal, insultó al por entonces viceintendente Marcelo Cossar. Le dijo "mogólico", por lo que fue denunciado ante el Inadi.
Al conocer su proyecto sobre el padre de la Pantera Rosa, el hoy legislador del radicalismo expresó su repudio. "Lo tomamos como una provocación. En la puerta de la Legislatura hay jubilados que se movilizaron para que les dejen de diferir los aumentos, a ellos es muy difícil explicarles proyectos de este tipo, es una provocación", dijo Cossar.
"Es muy difícil, no hay forma de justificarlo, es un papelón y me da vergüenza ajena. Hay que pedirle disculpas a la gente", sentenció en Noticiero Doce.