Con el mismo argumento que ya había sido rechazado por el radicalismo, Cristina Kirchner despegó a una agrupación kirchnerista de la muerte de un joven en Jujuy. En la madrugada del 9 de agosto, día en que se votó por las PASO, Jorge Ariel Velázquez fue asesinado de un tiro en la localidad de San Pedro.
La Presidenta sostuvo que se trató de un hecho de inseguridad y dijo que la víctima no era militante de la UCR sino del Partido por la Soberanía Popular, que lidera Milagro Sala. El miércoles, la dirigente jujeña había sostenido lo mismo y mostró papeles con la afiliación del joven a su partido.
Sin embargo, Ernesto Sanz, presidente del radicalismo, rechazó los dichos: "Desmiento totalmente a la Presidenta. Ratifico que el chico muerto en Jujuy era un militante de la UCR, más allá de su afiliación". De acuerdo al dirigente, Velázquez iba a una escuela que maneja la agrupación de Sala y por eso "lo hizo afiliar de prepo, como hacen afiliar a mucha gente".
Gerardo Morales, senador nacional por Jujuy que había reclamado investigar si el crimen tuvo motivos políticos, le contestó a Cristina vía Twitter.