En realidad no fue lo que pareció, el beso del matrimonio Macri. La escena de amor sigue dando tela para cortar. Ahora, dicen que de espontaneo tuvo poco. La biografía de la primera dama, develó cómo nació la idea. “Me lo confirmó el hombre detrás de esa escenificación, Jaime Durán Barba, el principal consultor del PRO”, contó Lindner.
Según esta versión, antes del debate hubo un intercambio de ideas con Marcos Peña y su equipo. Pero fue el gurú del PRO el que se acercó a Awada y le hizo una pregunta. “¿Y tú qué quisieras hacer en el final del debate? La verdad, a mí me gustaría darle un beso a mi marido. Es lo que siento”, le contestó a Durán Barba.
A cinco días del debate, Duran Barba aprobó. “Me parece genial”, dijo. A partir de ese momento, Awada se puso a ensayar. “Fue idea de ella y salió muy bien. Claro, lo preparamos un poco”, le contó al periodista.
La biografía dice que Awada trabajó junto a un media coaching para manejarse con soltura en la televisión. Durante 48 horas se ensayaron simulacros de entrevistas, abordajes de falsos movileros y prácticas de dicción y postura corporal, entre otros ejercicios.