Lázaro Báez volvió a hablar desde la cárcel, después de haber acusado de Cristina Kirchner por haberlo "usado de forro" para despegarse de posibles casos de corrupción.
Ahora, denunció que lo amenazan para que cierre la boca, al conocerse la segunda parte de la entrevista que concedió al portal Infobae desde la prisión de Ezeiza.
“Me están apretando para que calle, me están apretando para que no siga hablando” señaló el empresario, quien volvó a reconocer que siente miedo de que sus hijos sean detenidos.
Compartimos lo más destacado de la entrevista:
- ¿Cristina sigue siendo intocable en la Justicia?
- No, no sé. Eso depende de la intencionalidad que tenga cada uno de investigar las cosas como corresponden. Si tienen ganas de hacer las cosas bien, nadie es intocable. Cada uno se deberá defender y justificar las cosas que hizo en la manera que corresponde y dentro de los parámetros de la ley.
- ¿Existe un pacto de impunidad o un pacto de silencio entre usted y Cristina, como se decía?
- Yo no tengo pacto con nadie. Soy el único… mire, ¿yo soy el testaferro y soy el único que dice “hay que investigar la obra pública”?. ¿Usted cree que yo tengo pacto de impunidad al pedir esto? No. Evidentemente que hay gente en la justicia que no quieren que esto suceda. O tienen acuerdo tácito predeterminado en dónde tiene que morir esta investigación.
- ¿Pero usted está seguro que Casanello se reunía con Cristina?
- No, estoy más que seguro.
- ¿Usted lo vio o se lo contó alguien?
- Pero por supuesto. A mí no me lo contó nadie, yo lo vi.
- ¿Cómo está usted en Ezeiza?
- Y, complicado. A nosotros… la heladera que está acá, estaba acá cuando llegamos nosotros; el televisor estaba acá cuando llegamos nosotros. Lo único que me permitieron traer fue una cocina eléctrica, un hornito eléctrico, porque no se puede usar nada de gas, porque si no presumen que existe riesgo de suicidio.
- ¿Usted tiene contacto con alguno de los implicados por la ruta del dinero que está detenido? ¿(Chueco, Pérez Gadín?
- No, no, Pérez está acá conmigo. Pero Pérez no es mi contador. A Pérez lo metieron porque apareció contando dinero con mi hijo. Pérez no tiene nada que ver conmigo.
- ¿Y de dónde salió el video de La Rosadita?
- ¿El que estaban contando? No me diga que usted tampoco sabe. ¡No! ¡No! Nosotros vendimos un barrio cerrado completo acá. Nosotros vendimos 80 propiedades de un barrio cerrado, donde una de las que compró es la hermana de Prat-Gay. Nosotros fuimos acusados incluso de violar la (ley) penal cambiaria porque compramos supuestamente en el 2012 dólares, y estaba restringido. Y nosotros no fuimos los que compramos los dólares; los que compraron los dólares son los que compraron las propiedades. Nosotros vendimos propiedades por más de 7 millones 800 mil dólares. Y está declarado y está presentado en el expediente.
- Lázaro, ¿qué pasa si en julio, el mes que viene o en los próximos días terminan deteniendo y encarcelando a sus hijos?
- No sabría qué decirte. Mis hijos no tienen nada que ver. En realidad me están apretando. Me están apretando para que me calle, me están apretando para que no siga hablando. Por eso lo están haciendo.
- ¿Con Cristina hace cuánto que no habla?
- Eso fue antes de las elecciones generales cuando le dijimos que le queríamos devolver el mausoleo. En Santa Cruz hay un decreto provincial en donde ellos se tenían que hacer cargo, no se querían hacer cargo. El gobierno, tampoco. Como Cristina estaba peleada con Peralta y el gobierno municipal nos estaba generando un inconveniente y un llamado continuo de atención porque teníamos seguridad privada dentro de un espacio público como es el cementerio. No corresponde a las normas, eso generó otro problema serio con ella.
- ¿Usted fue confidente de Néstor Kirchner?
- Yo soy amigo de haber crecido con él. Tuve la suerte de haber crecido con él. En un lugar, imagínese que Río Gallegos en ese momento tenía 50 mil habitantes nos conocíamos todos. Los peronistas estábamos siempre en los mismos actos, nos conocíamos todos. Yo tengo 60 años, Luis. Esto no tiene nada que ver con otra cosa.