El fiscal general de la Cámara del Crimen Ricardo Sáenz sostuvo hoy que Alberto Nisman fue "víctima del delito de homicidio" y pidió que la causa por la investigación de su muerte pase a al fuero federal.
Es la primera vez que un funcionario judicial dice que se trató de un homicidio, el hecho ocurrido la noche del 18 de enero de 2015, cuando Nisman fue encontrado muerto en el baño de su departamento de Puerto Madero con un disparo en la cabeza, cuatros días después de haber denunciado a la entonces presidente Cristina Kirchner, al canciller Héctor Timernan y otras personas del gobierno de encubrir a los acusados del atentado a la AMIA.
Hasta el momento, la fiscal del caso, Viviana Fein, y la jueza de instrucción Fabiana Palmaghini habían dicho que no descartaban ninguna hipótesis de suicidio u homicidio.
Ricardo Saénz presentó su dictamen en la Sala VI de la Cámara del Crimen, integrada por los jueces Marcelo Lucini, Mario Filozof y Rodolfo Pociello Argerich, que el próximo 18 de marzo realizará una audiencia para decidir en qué fuero debe tramitar el expediente. Si la Cámara avala el cambio, la causa pasará a los tribunales de Comodoro Py.
En el dictamen, Saénz sostuvo que a su criterio hay varios elementos para considerar que a su colega lo asesinaron y que ese crimen se dio "en un contexto de zona liberada para neutralizar su actuación profesional".
Además, resaltó que el arma que produjo la muerte de Nisman deja residuos de disparo pero en la mano del fiscal no se encontró ninguna deflagración. "Por ende, no caben dudas ya de que no fue Alberto Nisman quien disparó el arma que le dio la muerte, lo que necesariamente lleva a concluir que fue víctima de un homicidio".
Sáenz afirmó también que a Diego Lagomarsino, el técnico informático que le dio el arma a Nisman, debe estar imputado por la muerte y no solo por la entrega del arma.