Después de que gobierno kirchnerista expropiara la ex Ciccone Calcográfica, la Justicia estimó que esa decisión política le costará al Estado por lo menos 300 millones de pesos. A ese monto hay que sumarle el seis por ciento de interés anual, por lo que la cifra total superará los 350 millones de pesos y puede elevarse mucho más.
El fallo judicial desmiente las promesas del kirchnerismo, que había dicho que la expropiación de la imprenta no le costaría "ni un peso" a las arcas públicas.
La decisión quedó en manos de la Sala D de la Cámara de Apelaciones quien intimó al Estado a depositar esos fondos "dentro del plazo de 30 días hábiles a contar a partir de la notificación al Ministerio de Economía".
El gobierno de Mauricio Macri, resiste pagar esa suma multimillonaria, por lo que los abogados de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ya apelaron el fallo judicial a la espera de que la Corte Suprema de Justicia revierta la sentencia.
El objetivo de la AFIP es que la Justicia admita la compensación entre lo que en principio vale la empresa (unos 300 millones de pesos) y las deudas impositivas que la familia Ciccone acumuló durante años hasta superar los 275 millones de pesos.
Sin embargo, tanto el juez a cargo de la causa como los camaristas consideran que admitir esa compensación sería un trato inequitativo para todos los demás acreedores que aspiran a recuperar al menos parte de los millones que les adeudan los Ciccone.