Se sigue conociendo información que refuerza la hipótesis sobre que José López y las monjas del monasterio de General Rodríguez tenían una relación habitual.
La Justicia comprobó que una de las religiosas del convento llamó ocho veces a la esposa del ex funcionario kirchnerista durante la madrugada en la que fue detenido cuando intentaba esconder bolsos con casi 9 millones de dólares. El dato surge de los cruces telefónicos entre los celulares que fueron secuestrados.
Las comunicaciones fueron efectuadas entre las 0.24 y la 1.29 de la noche. Una de las conversaciones desde el celular de la hermana Alba con el de Amalia Díaz duró más de 4 minutos: 256 segundos.
En su declaración ante el fiscal Federico Delgado, la monja de 95 años había dicho que había atendido llamadas de López y su mujer, pero no que ella también había llamado a ellos.
El registro del celular que usaba la esposa del ex secretario de Obras Públicas comprobó que hubo 40 llamadas en las últimas 24 horas antes de la detención de López.