En este capitulo podés aprender a hacer dos versiones de sándwiches distintos: unos fritos y panchos al horno. Dos ideas tentadoras para salir del paso.
Para hacer los sánguches fritos, lo primero que hacemos es la mezcla. Integramos harina, con huevo y leche, condimentamos con sal y pimienta y le damos un toque de polvo de hornear, para que la masa quede esponjosa.
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Luego armamos los sanguchitos de miga, con jamón y queso. El secreto acá es presionarlos bien por los bordes y sacarle con un cuchillo los bordes más sequitos. De ahí se pasan por la mezcla y con una pinza se los lleva a la olla con el aceite para freir. Y...¡listos!
La versión alternativa de los panchos, empieza interviniendo los panes, haciéndoles un corte del tamaño de la salchicha sobre el pan. En ese espacio ponemos queso cheddar, la salchicha, panceta ahumada y cebollita de verdeo. Un toque final de queso por arriba...¡y a gratinar al horno!
La clave es comerlos recién hechos y calentitos. Dos opciones divertidas y ricas que te pueden sacar del apuro.