Como si estuvieran en una tranquila sobremesa, con guitarra y bombo, “Los Manseros Santiagueños” pasaron una vez más por Córdoba. “El locro más rico es el de Santiago del Estero, es un locrazo. Es el auténtico el que tenemos nosotros”, aclaró antes que nada el mítico Guillermo Reynoso.
A diferencia de sus maratones nocturnas en los festivales de verano, esta vez los folcloristas tocaron en plena siesta. “Estamos acostumbrados a tocar de noche, somos nocheros. El gusto es de noche”, explicó Reynoso.
Afuera, sin horarios, una multitud esperaba a “los Rolling Stones” del folclore, como los describió alguna vez León Gieco. Y ellos no esquivaron el calor popular. “Nosotros no nos pillamos como otros, que se andan escondiendo para no salir en la foto con la gente”, destacó Onofre Paz. “Ponen de culata la camioneta en el escenario y se mandan a mudar”, agregó.
Pese al frío y la lluvia, el espectáculo fue seguido por chico y grandes. Paz se mostró agradecido: “Nos sigue la gente joven y la gente de la tercera edad. Parece que siempre estamos de moda”.