Como sucedió durante la semana pasada, los cordobeses que salieron a trabajar o estudiar bien temprano este lunes tuvieron un dolor de cabeza: los choferes del transporte interurbano volvieron a realizar asambleas y paralizaron el servicio entre las 5 y las 7.
Las negociaciones entre empresarios y choferes no avanzaron y la Asociación Obrera de la Industria del Transporte Automotor (AOITA) ratificó la medida. El foco del conflicto es el techo del 15 por ciento que ofrecen las empresas. Desde el gremio lo rechazan y reclaman, al menos, una cláusula gatillo para emparejar a la inflación.
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El vocero Emiliano Gramajo graficó la postura del sindicato y la comparó con lo que sucede en el transporte urbano: "Tenemos casi tres meses vencidas las paritarias. Las nuestras son de enero a diciembre, en cambio en UTA son de marzo a marzo".
El próximo martes habrá una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Nación para intentar llegar a un acuerdo. De lo contrario, podría tomar fuerza un paro para el fin de semana largo de Pascua, del 30 al 2 de abril.
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