Los padres de una niña de 7 años denunciaron que abusaron a su hija en el baño de un colegio religioso en Rafaela, Santa Fe. La pareja fue la que llevó la acusación a la Justicia y reclamó que mientras avanza la investigación, separen a todo el personal masculino de la institución.
El hecho sucedió el pasado 28 de julio en el colegio San José de Rafaela, una de las escuelas religiosos más reconocidas de la zona. A la menor se le realizó una cámara Gesell y en el resultado confirmó el abuso de un hombre adulto en el baño de la institución. Todo habría transcurrido durante el horario de cursado.
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Si bien la Justicia santafesina no pudo identificar aún al agresor, la niña de 7 años pudo dar algunos datos claves para avanzar con la investigación. “No sería difícil identificarlo si la institución y el obispado colaboraran”, planteó Vanesa, la madre de la nena a Radio Rafaela. El colegió San José depende del obispado de la provincia.
Marchas y reclamos
Luego de la denuncia de los padres, comenzaron las protestas y las movilizaciones en la ciudad con el pedido de justicia y explicaciones por parte del colegio. “Solicitamos el inmediato apartamiento de todo personal masculino de la institución y/o el dictado de sus clases de forma remota hasta tanto se identifique al responsable”, reclamó uno de los participantes.
+ Algunas de las pancartas colocadas en las paredes del establecimiento. Foto: La Opinión de Rafaela.
Vanesa, madre de la niña, es exalumna del colegio San José y tuvo una reunión con el propio obispo de Rafaela, monseñor Luis Fernández Alara. Pese a las negociaciones, no pudo lograr que separen a los hombres que trabajan en el lugar para poder avanzar más rápidamente con la investigación.
El religioso le aseguró que espera por el veredicto de la Justicia provincial para tomar una decisión al respecto. Además, le aseguró que el colegio se pondría a absoluta disposición para ser investigado, algo que los padres denuncian que no ha sucedido.
El Ministerio de Educación de Santa Fe también intervino en la situación para que se inicie un sumario administrativo sobre el colegio. La madre de la menor expresó su enojo: “Queremos justicia por mi hija y por todos los chicos. El colegio nos cerró las puertas". "No vemos colaboración por parte de la escuela ni del obispado”, sentenció la mujer.