Este viernes cierra la primera semana del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado por un grupo de rugbiers en Villa Gesell en 2020. Su mamá María Graciela Sosa Osorio se expresó ante la prensa antes de ingresar a Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores en la quinta audiencia.
Durante estos cinco días, la familia debió revivir -y soportar- imágenes del violento ataque, escuchar un sinfín de testimonios de testigos y como si fuera poco, permanecer en un mismo lugar con los ocho rugbiers acusados de matar a su hijo.
En dos oportunidades del juicio proyectaron los crudos videos de la pelea y Graciela sacó fuerzas de donde no tiene para verlos una y otra vez. “Cuando veo esas imágenes siento la necesidad de lanzarme sobre mi hijo y cubrirlo con mi cuerpo”, confesó con la voz quebrada.
La mamá de la víctima aseguró que hay momentos del juicio en que “se siente re mal”. Es ahí cuando “agarra fuerte el rosario, trata de cerrar sus ojos, rezar un poco y seguir con fuerza”.
Luego de la intensa jornada del jueves, donde declararon 12 testigos, Sosa Osorio reveló: “Cuando llegué a casa sentí que me odiaba a mí misma. Me odiaba, me odiaba, me tuve que recostar, no quería que Silvino me hablara”.
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El dolor vuelve a apoderarse de su cuerpo al final de cada jornada: “Hasta que me pongo a rezar un poco y a llorar, a tratar de sacarme todo lo que siento. Y después me tranquilizo, tengo un poco de calma y me levanto de vuelta”.
Remarcó que “el día a día es muy difícil” y junto a Silvino, papá de Fernando, sienten la necesidad de estar con su hijo, abrazarlo y compartir un domingo en familia.
Durante toda esta semana en la que los rugbiers se presentaron en las audiencias con barbijo –salvo el jueves, día en que por primera vez se mostraron a cara descubierta-, Graciela “intentó mirarlos” aunque no llegó a reconocerlos “porque nunca se detuvo a mirarlos a la cara”.
“Como madre siento que no sienten culpabilidad, pareciera que están en su mundo. Uno no lo puede creer porque son chicos de la edad de Fer que tendrían que estar disfrutando con su familia. Y nosotros también estaríamos con Fernando felices”, cerró emocionada.