Alrededor de la 1.30 del de la madrugada de este lunes, Fernando Cáceres, un docente de 35 años, fue sorprendido por un ladrón mientras dormía en su casa de Virrey del Pino, La Matanza. El delincuente estaba armado con un machete e intentaba entrar por la ventana.
En cuestión de segundos, el dueño de la vivienda le gritó que estaba armado y agarró una escopeta calibre 16 doble caño, marca Browning. La misma que un familiar le había prestado días atrás por la ola de inseguridad que sufren los vecinos del lugar.
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Según informó Télam, el ladrón alcanzó a romper el vidrio de la ventana con el machete. Allí Cáceres disparó por primera y única vez: uno de los perdigones rompió la pared de madera y dio en el pecho del delincuente.
La muerte fue instantánea. "Nunca había disparado en su vida. La escopeta se la había facilitado un cuñado porque el lugar no era seguro. El delincuente ingresó a los machetazos con intenciones de matarlo", aseguró una fuente de la investigación.
Legítima defensa
El docente no fue imputado ni se tomó ninguna medida en contra suya: el fiscal Federico Medone entendió que se trata de un caso de legítima defensa. Sí se ordenó la incautación del arma y nuevas pericias en la casa.