Dos hombres atacaron violentamente a un churrero en una playa de Mar de Ajó, luego de que este se negara a "convidarles fuego". Le dieron un total de siete puñaladas y luego intentaron robarle su celular y su mercadería. Dos policías de la Bonaerense lo ayudaron y lo trasladaron hasta un hospital en donde se recupera lentamente.
El hecho de violencia ocurrió durante el viernes pasado en la costa argentina y tuvo como protagonista a un churrero de 33 años identificado como Nanuel Slipak, quien fue brutalmente atacado por dos presuntos delincuentes que le intentaron robar. Dos sujetos lo apuñalaron en varias partes del cuerpo por el simple hecho de que no quiso convidarles fuego para encender un cigarrillo.
Los primeros en asistir a Nahuel fueron dos policías de la Bonaerense y un empleado del camping que estaban apostados en la entrada del predio, ubicado en la esquina de Pueyrredón y Lebensohn, a unos 150 metros de la playa. Pese al ataque, los delincuentes no le pudieron robar ninguna de sus pertenencias.
+ MIRÁ MÁS: Una nena acuchilló a su padrastro al ver cómo golpeaba a su mamá
Los investigadores secuestraron una guitarra y una bicicleta, ambas de la víctima, además de la posible arma utilizada durante el ataque a Nahuel: está siendo sometida a pericias. Al llegar al hospital, los especialistas determinaron que Nahuel tendría que quedar internado en terapia intensiva, debido a que las puñaladas lograron dañar órganos internos. Según el parte médico inicial, presentó un “hemoneumotórax de pulmón por herida de arma blanca, herida en duodeno y colon”.
Pese a eso se logró recuperar y una vez fuera del centro de salud, pudo dar declaraciones en la fiscalía al respecto de su ataque. “La zona donde lo atacaron está prácticamente apartada, un sector de médanos sin edificaciones linderas. Lo más cercano que había era un camping y Nahuel cuando es atacado llegó allá a pedir ayuda”, precisó una fuente del caso que pudo acceder al expediente.
Nahuel se hospedaba a unas cinco cuadras del predio del camping municipal donde lo socorrieron y, de acuerdo con lo que trascendió, la madrugada del jueves pasado salió de comer de una rotisería, se dirigió a la zona de la playa y fue entonces que lo atacaron.