Dos polícías de la provincia de Córdoba fueron sancionados por violar el decreto del aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia del coronavirus en la localidad de General Deheza.
El domingo por la tarde, fueron sorprendidos reunidos junto a sus respectivas familias. Estaban tomando mates y comiendo facturas. Un vecino los denunció al escuchar gritos.
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Ambos agentes -uno de ellos alquila la vivienda y presta servicio en la localidad de General Cabrera- reconocieron que estaban desobedeciendo a la norma. Ante esta situación, quedaron demorados.
Si bien no fueron detenidos, el Tribunal de Conducta Policial ordenó pasarlos a situación pasiva. Quedaron suspendidos, se les secuestró el arma reglamentaria y su sueldo se verá disminuido. El fiscal Fernando Moine de Río Cuarto está a cargo de la investigación.