En los últimos días se repitieron los hechos en los que vecinos retuvieron a ladrones que estaban intentando robar. En Unquillo, un hombre chocó al delincuente que ingresó a su casa y lo dejó grave. En Villa del Rosario, 150 personas llevaron a un hombre a la comisaría y en La Calera retuvieron a otro hasta que llegó la Policía.
En el caso de Unquillo, el dueño de la casa robada quedó imputado por lesiones graves tras embestir y provocarle una fractura expuesta al asaltante. En ese marco, el fiscal Enrique de Aragón, explicó en Arriba Córdoba los límites entre la legítima defensa, hacer “justicia por mano propia” y el delito.
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“Todo ciudadano frente a un delito tiene la posibilidad de aprehender al delincuente y mantenerlo en el lugar hasta que llegue la Policía”, precisó de Aragón. Y agregó: “Ahora en el marco de esta aprehensión se excedan límites como golpear a la persona o recurrir a medios excesivos para sujetarlo que puedan ser peligrosos porque se cruza una línea que incurre en un delito”.
+ VIDEO: la explicación del fiscal de Aragón en Arriba Córdoba:
A su vez, destacó que “la situación de aprehender a un ladrón en sí es riesgosa” porque el ciudadano tiene “la posibilidad legal de hacerlo pero no está obligado como la Policía”. “La diferencia es que la Policía está capacitada entonces el riesgo para la persona que van a aprehender y la que aprehende cambia según quién lo hace”, comentó.
Enrique de Aragón también indicó que la persona que aprehende debe tener una “actitud medida para no excederse”. Para ello, debe limitarse a aprehender hasta que llegue la Policía.
Exceso
Para el fiscal, si la Policía “pisa al ladrón, le dispara o una vez aprehendido comienza a golpearlo para mantenerlo reducido” se trata de un procedimiento legal. En tanto, si eso lo hace un vecino es una “actitud ilegal y delictiva”.
“El sentido común y la razonabilidad indica hasta dónde uno puede llegar para hacer lo necesario para que esa persona permanezca en el lugar sin correr riesgo físico hasta que llegue la Policía y se lo lleve”, añadió al respecto de Aragón.
Por último, destacó que “hay que tomar en cuenta la proporción de los intereses que están en juego”.