El crimen de Valentino Blas Correas a manos de un policía sigue desatando aristas. Una de las sospechas de la investigación, que ya tiene a dos efectivos detenidos e imputados, es que plantaron un arma para atribuírsela a los jóvenes amigos del adolescente fallecido e intentar justificar el asesinato.
Miguel Robles, exsubsecretario de Delitos Complejos del ministerio de Seguridad de la Nación y exdirector del Poder Judicial de Córdoba, fue consultado por El Doce para realizar un análisis del caso y dejó una gravísima denuncia.
“Hay un protocolo no dicho de la Policía que algún día hay que afrontarlo: muchos móviles policiales llevan armas truchas para plantar en las escenas del crimen. Es un delito tremendo, increíble”, lanzó.
+ VIDEO: La grave denuncia de Miguel Robles:
+ MIRÁ MÁS: Investigan y podrían imputar a más policías
En ese sentido, agregó indignado: “Significa que, el que lo hace, ya está previendo generar un enfrentamiento para atribuirle al muerto toda la responsabilidad”.
Blas tenía 17 años y había salido a un bar con sus amigos.
Además, no dudó en asegurar que “si se demuestra lo del arma plantada, va a ser un escándalo” que sacudirá a la institución policial de Córdoba.
Detalles del crimen
Por ser experto en seguridad y en armas, Robles opinó sobre el accionar de los policías que derivó en la muerte de Blas. “Fue claramente un exceso”, afirmó.
Además, explicó que presume que el policía que efectuó el balazo fatal es un tirador experto, ya que tiene ocho años de servicio, es cabo primero y pasó por distintos cursos y ascensos.
+ MIRÁ MÁS: La mamá de Blas: “A mi hijo lo acribillaron”
“Los disparos fueron hechos a la altura de la cabeza del conductor”, indicó. Uno de los balazos está demostrado que pegó en el apoya-cabezas del auto, por lo que de milagro no fue una tragedia aún mayor.
“Pudo haber sido una masacre”, dejó en claro Robles, destacando que los amigos de Blas estuvieron también al borde de ser asesinados.
¿Arma plantada?
Según la reconstrucción de los hechos, el adolescente salió con sus amigos a un bar en un auto Fiat Argo. Cerca de la medianoche, cuando estaban regresando a sus casas, tuvieron un altercado con una moto y el conductor del auto habría acelerado para huir: allí habrían evadido el control policial.
Más adelante, a la altura de Plaza de las Américas, se toparon con otro control, en el cual no frenaron e inmediatamente al menos dos policías desataron una balacera contra el auto.
Uno de los balazos entró por la parte trasera del vehículo y le dio en la espalda a Blas. Sin notar la gravedad de la herida y aterrados por los disparos, los jóvenes continuaron camino hacia la zona de Nueva Córdoba.
La información oficial de la investigación indica que en la escena del crimen rescataron dos armas policiales, que son las de los policías que admitieron haber disparado.
+ MIRÁ MÁS: Massaccesi pidió justicia por Blas: “Es parte de mi familia”
Sin embargo, también apareció una tercera arma de fuego: se trata de un revólver. Según policías, únicos testigos de este hecho, el arma fue arrojada desde dentro del Fiat Argo en el que viajaban Blas y sus amigos. Hasta el momento no hay pruebas de que los jóvenes hayan efectuado algún disparo.