Era 19 de abril de 2018. Candela Nitti regresaba de Villa General Belgrano con sus dos hijas a bordo de su auto Renault 9 cuando impactó contra un Volvo C30 conducido por una mujer de 28 años que iba junto a su hija de 16.
Tras el accidente, la hija de Candela de siete años murió, mientras que su hermana melliza sufrió graves heridas que le provocaron una lesión axonal difusa severa que afecta el 100% de su parte neurológica.
Un Audi A5 color blanco habría sido el responsable del trágico siniestro por una mala maniobra. Pasaron tres años del trágico siniestro y aún no hay justicia ni detenidos.
La investigación
Gustavo Anna, abogado de la familia de la víctima, detalló a Noticiero Doce que hay un solo imputado y es Agustín Furgibuele, quien en ese momento tenía 61 años y con un Parkinson severo.
"En una actitud desaprensiva, el Audi que produce el accidente que choca a la señora, se da a la fuga y con total impunidad vuelve a aparecer en el accidente porque unos jóvenes lo paran tras ver el hecho. Vuelve con un espíritu curioso y en ese momento Furgibuele le pone una pastilla en la boca (a Maximiliano, el papá de la nena que llega minutos después) que lo adormece totalmente", reveló.
Al parecer, el Audi A5 blanco estaba a nombre del exjefe de Policía de la Provincia de Córdoba, Julio César Suárez, quien estuvo detenido y recuperó la libertad a los pocos meses. Después del choque, el vehículo desapareció. Fue encontrado cinco meses más tarde en Villa Ballester, provincia de Buenos Aires.
"No nos cabe la menor duda de que fue escondido. El auto al momento del accidente era de propiedad de quien era el comisario general de la Policía de la Provincia, Julio César Suárez. Con un gran trabajo de la fiscalía, que intervino aproximadamente 30 líneas telefónicas, logra establecer que estaba en Villa Ballester, provincia de Buenos Aires", agregó.
+ VIDEO: el dolor de la familia
El pedido de justicia a tres años del trágico final
La familia exige una indemnización por los daños ocasionados a su hija que sobrevivió y por el fallecimiento de Azul. Además, piden la detención del responsable del hecho.
"Fue un día difícil (por el lunes cuando se cumplieron tres años). Pero seguimos sosteniendo el pedido de justicia y de que los tiempos puedan ayudarnos para seguir adelante. Recordando lo que sucedió y la necesidad de la resolución y de que en estos tres años hubo avances pero cosas que son necesarias como la rehabilitación de mi hija", expresó Candela.
Por su parte, Maximiliano, su pareja y padre de las nenas, detalló el estado de salud de su hija: "Tiene una lesion axonal difusa severa, parte de neurológica 100 por ciento, hemiparesia derecha. Estuvimos unos cuántos meses en el Hospital Santísima Trinidad haciendo rehabilitación de agudos. No tiene techo su rehabilitación, pero es un camino largo. Se va a volver a recuperar, es nuestro deseo y el de ella también".
Foto: la lápida en memoria de Azul en el lugar del accidente.
La defensa del único imputado
En comunicación telefónica con Noticiero Doce, Agustín Furgiuele aseguró que no tuvo ninguna participación en el hecho, "ni directa ni indirecta". "No sé por qué me imputaron", sentenció. Además, agregó que tiene una foto cargada "en la nube" que fue sacada a la misma hora del accidente.
"El auto estaba a la venta y en el taller para ser entregado a la personas que lo iba a comprar", se excusó al ser consultado acerca de por qué fue encontrado a los cinco meses.
Sobre su enfermedad, indicó: "Tenía Mal de Parkinson en forma incipiente. Tuve un carnet de conducir que me permitió manejar hasta una motoniveladora. Dejé constancia sobre eso en el Registro de la Municipalidad".
Foto: Agustín Furgiuele y Julio César Suárez.