“Perpetua para todos”, ese es el reclamo de Silvino Báez y Graciela Sosa, el papá y la mamá de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado a golpes el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell.
Pasaron tres años del asesinato y desde entonces ocho rugbiers están detenidos esperando sentencia. Se trata de Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23).
Este miércoles inició la recta final del juicio en el Tribunal Oral en lo Criminal Nº1 de Dolores. Es la primera jornada de alegatos. Los fiscales Gustavo García y Juan Manuel Dávila expondrán los argumentos sobre el pedido de prisión perpetua y apuntarán sobre la autoría de cada uno de los acusados de matar a Báez Sosa.
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La fiscalía sostiene que deben ser condenados por homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas.
Los abogados que representan a la familia Báez Sosa también harán su alegato. De acuerdo a lo que trascendió, el equipo de la querella mostrará un video en el que aparecen los acusados y sus respectivos movimientos aquella madrugada de enero del 2020. Insisten en que los ocho rugbiers planearon el crimen y fueron cómplices.
El jueves, la defensa de los acusados expondrá su estrategia que, durante todo el debate buscó demostrar que se trató de un homicidio en riña o agresión y que no hubo premeditación ni intención de matar. La figura penal prevé una pena de entre dos y seis años de cárcel.
Durante la primera etapa del juicio, solo declararon Lucas Pertossi, Luciano Pertossi, Ciro Pertossi, Máximo Thomsen y Blas Cinalli. El resto se mantuvo en un silencio hermético. Se espera que en el final hagan uso de la palabra ante los jueces. El próximo martes 31 de enero cuando dictarán el veredicto.