Comenzó la tercera audiencia del juicio por el crimen de Valentino Blas Correas luego de que se difundiera el video de la balacera policial que acabó con la vida del adolescente de 17 años el 6 de agosto del 2020. Esta prueba es crucial y compromete más a los dos policías que abrieron fuego contra el Fiat Argo en el que iban cinco amigos.
Uno de ellos es el cabo Javier Alarcón, que aparece en la escena del crimen en la secuencia que quedó registrada por las cámaras de los patrulleros.
Aseguró que “no había ningún plan con Gómez”, el otro cabo que disparó y cuya bala impactó en la espalda de Blas. En su defensa, aclaró: “Nunca disparé con la intención de matar”.
Según expuso ante el tribunal y el jurado popular, llegó a la avenida Vélez Sarsfield y Romagosa, frente al complejo Pablo Pizzurno, luego de recibir la “orden de controlar un auto que se había dado a la fuga”. “Por radio dijeron que habían querido cometer un delito, que eran seis personas y podrían estar armados”, relató.
El paso a paso según Alarcón
De acuerdo a la secuencia policial definida por el fiscal de Cámara, Marcelo Hidalgo, a las 00:04 los policías Leandro Alexis Quevedo y Ezequiel Agustín Vélez "irradian" por frecuencia policial la presencia de los sospechosos en un Fiat Argo. Declararon que un motociclista les advirtió que el auto lo encerró con supuestas intenciones de robo.
En ese contexto, Alarcón dijo que “se imaginaba un control de rutina” y que cuando bajó vio “que el Fiat Argo encaró a Gómez”, quien acto seguido “desenfundó el arma”. “Al escuchar disparos”, cargó el arma y “tiró a las cubiertas del vehículo”.
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El fiscal de Cámara, Fernando López Villagra, expuso que en el lugar hallaron cinco vainas servidas. Afirmó que todo ocurrió a las 00:07:57 horas y contabilizaron “seis disparos, dos policías, un muerto y cuatro víctimas muy cerca de morir”.
Gómez y Alarcón están acusados por homicidio calificado agravado por la muerte de Blas Correas y por el mismo delito en grado de tentativa al disparar contra los otros adolescentes.
En esta audiencia, el cabo Gómez se abstuvo a declarar. La misma determinación tomó la agente Wanda Esquivel, quien estaba en el móvil con Alarcón y completó la maniobra de encubrimiento al dejar el revólver calibre 22 a metros del hecho. Sostuvo que ya había declarado en otras tres oportunidades.
Cabo Lucas Gómez, acusado de matar a Blas. (Foto: Juan Pablo Lavisse/El Doce)